Esta obra reúne 16 cuentos cortos escritos a dos manos en los que predomina el nonsense al que nos tiene acostumbrados Nesquens. A mí me encanta el sinsentido y las historias rocambolescas como estas, con finales de microrrelato y en el que aquí los personajes principales, animales u objetos humanizados, conviven con personas en papeles secundarios. Sin embargo, los autores ya han colaborado en una obra similar, "Casi un millón de cuentos" de la editorial Edelvives. Como hemos comenzado a seleccionar hace relativamente poco tiempo, descartaría esta obra a la espera de lo que se publicará los próximos meses. Tampoco su edición e ilustraciones son tan reseñables como para mantenerlo en reserva. Voto negativo.
No hay duda de la habilidad que tiene Daniel Nesquens a la hora de hacer uso de lo cotidiano y transformarlo en algo mágico. Ese humor que aporta a situaciones normales y corrientes, la personificación en animales y cosas, los juegos de palabras y el toque absurdo y disparatado de cada cuento.
ResponderEliminarPero una vez más va en la misma línea que en otras obras suyas como "17 cuentos y dos pingüinos" o en "Casi un millón de cuentos", también en coautoría con Pepe Serrano. Me ha parecido repetitivo.
Las ilustraciones, de aire estilizado, tampoco me terminan de convencer en este tramo de edad.
Por todo ello mi voto también es NEGATIVO.